Votar y
Botar
Llegamos al final de la campaña
electoral anonadados, una vez más, por la escasez de propuestas y la avalancha
de injurias de parte de la política profesional. Es cierto lo que decía aquel refrán de que en
todas partes cuecen habas pero en esta campaña el título de Máster Chef se lo
lleva, sin duda, Esperanza Aguirre. La candidata a la alcaldía de Madrid
siempre quiere ganar en todo, de cualquier manera y de cualquier modo, y no le
tiembla el pulso para disparar contra los más elementales principios del
respeto y la convivencia. Lamentable el
bochornoso espectáculo disfrazado de debate
que Aguirre orquestó en Telemadrid para acusar a Manuela Carmena,
candidata en Ahora Podemos, de simpatizar con los terroristas. Manuela Carmena
estuvo durante mucho tiempo en el punto de mira de ETA que era una banda pero
no de música por si Esperanza Aguirre no se acuerda. La estrategia habitual en
campaña electoral del Partido Popular para
montar un walking dead con las víctimas de ETA debería enterrarse ya por
muchos votos que les pueda aportar. No todo vale y Aguirre podría confiar su
suerte a un programa electoral con algo
más de diez puntos y no tanto a remover el sufrimiento de las víctimas con el
eterno recuerdo a los verdugos. Cuando se usan tácticas tan rastreras se puede
acabar en el fango con la declaración de la renta publicada y el consiguiente
bochorno de que todo un país descubra que hay quien cobra más de 300.000 euros
por nada. Aguirre dice que fue por cazar
talentos pero es bien conocido que ella solo cazaba delincuentes como Granados
para llevarlos en sus listas. También dice Esperanza que ganó un premio
literario pero cuesta creer a la magna
escritora cuando no sabe desarrollar un programa electoral con más de diez
puntos. Puede ser que lo de no
llevar programa electoral a las
elecciones sea otra de las grandes ideas del Partido Popular para poder hacer
en la legislatura lo que les dé la gana. María Dolores de Cospedal ha
presentado su programa electoral el último día de campaña porque le ha dado la
gana. Y Rita Barberá se ha gastado 278.000 euros del ayuntamiento en hoteles de lujo y
berberechos porque también le ha dado la gana. Para limpiar el vómito de la
corrupción el voto es la única solución. Votando debemos limpiar las instituciones de corruptos de cualquier
clase, tipo e ideología, y de actitudes repugnantes e insultantes. Es el primer
paso para reconstruir el país de las maravillas de Mariano donde a nadie ya le
importa el paro. Y es también el primer paso para cambiar nuestra sociedad
desde el profundo interior de nuestro sobre porque los políticos son solo un
reflejo de sus sociedades. Feliz día del Fairy.
Y mucho más en http://politicahora.es/
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